Tratamientos para madera exterior

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La madera es un material noble, cálido y estético, muy valorado tanto en interiores como en exteriores. Requiere de un cuidado especial sobre todo la madera exterior expuesta a factores que pueden deteriorarla si no se toman las medidas adecuadas.

Como pintores profesionales en Alicante con años de experiencia en el tratamiento y restauración de superficies exteriores (barandillas, pérgolas, puertas, ventanas, porches, vallas o muebles de jardín de madera), sabemos lo importante que es proteger la madera, manteniendo toda su belleza y funcionalidad.

Contacte con nosotros y le explicaremos cómo cuidar la madera de exterior, los mejores tratamientos disponibles y consejos útiles, que le ayudarán a alargar la vida de esos elementos naturales.

¿Por qué es tan importante proteger la madera exterior?

La madera es un material vivo, natural y poroso que cuando está al aire libre y si no es tratada correctamente, su aspecto, resistencia estructural y durabilidad, se ve directamente afectada por los factores climáticos, pudiéndose:

• Agrietar o deformarse por la exposición al sol intenso.
• Humedecerse y pudrirse debido a la lluvia o a la humedad ambiental.
• Ser atacada por insectos xilófagos (como termitas o carcoma).
• Perder color y belleza por la acción de los rayos UV.

Proteger la madera exterior no es solo una cuestión de estética, sino también de seguridad y economía.

Un tratamiento preventivo y tratamiento adecuado alargan la vida útil de la madera y evitan reparaciones costosas, de ahí la importancia de proteger la madera, especialmente en zonas como Alicante donde el sol y la salinidad del ambiente aceleran el desgaste.

Tipos de madera más utilizadas en exteriores

No todas las maderas se comportan igual frente a la intemperie, algunas ofrecen mayor resistencia de forma natural, mientras que otras requieren de una mayor protección.

Entre las maderas de exterior más utilizadas destacamos:

• Maderas tropicales: Como la teca, el iroko o el ipé. Altamente resistentes a la humedad y duraderas, pero también más caras. Ideales para tarimas, pérgolas, muebles de jardín.
• Pino o abeto: Muy común por su buena relación calidad-precio. Son menos duraderas y precisan ser tratadas previamente con protectores especiales. También requieren un mantenimiento regular.
• Cedro rojo: Resiste bien al agua y es muy estable dimensionalmente.
• Roble, castaño: Ofrecen buena resistencia, aunque puede cambiar de tono con el tiempo si no se protege.

Independientemente del tipo de madera a utilizar, toda madera exterior debe tratarse adecuadamente y de forma regular, para soportar las condiciones climáticas y mantener su aspecto.

Los mejores tratamientos para madera exterior

Existen varios tratamientos para madera exterior, la clave está en elegir el producto adecuado que va a depender del tipo de madera, ubicación y uso.

Entre los más recomendados encontramos:

1. LASURES O BARNICES AL AGUA

Tratamiento superficial que penetra en la madera sin formar película, permitiendo que respire y al mismo tiempo protegiéndola contra la humedad, sol y hongos.

Hay lasures con diferentes niveles de color, protección UV, y con acabado mate, satinado o brillante.

Ventajas: No se cuartea con el tiempo, fácil de mantener, protege contra hongos y rayos solares.Ideal para pérgolas, vallas, casas de madera.

2. BARNICES SINTÉTICOS

Forman una capa dura sobre la superficie de la madera, protegiéndola del sol, la humedad y los golpes.

Son muy decorativos y resistentes al roce aunque con el tiempo tienden a cuartearse y su renovación requiere lijado completo. Ideal para puertas de entrada, ventanas, elementos decorativos.

3. ACEITES PARA MADERA

Son tratamientos fáciles de aplicar que nutren la madera desde el interior, realzando su veta natural y repelen el agua.

Se aplican especialmente en maderas tropicales como la teca o el ipé y son ideales para mobiliario de jardín, tarimas, suelos de exterior.

4. IMPRIMACIONES FUNGICIDAS E INSECTICIDAS

Son tratamientos previos que protegen la madera de ataques biológicos (moho, hongos, termitas, carcoma). Son imprescindibles si la madera no ha sido tratada en fábrica.

Ideal para: cualquier elemento estructural o decorativo de madera que esté en contacto con el suelo o expuesto a la humedad.

Cuidados básicos y mantenimiento de la madera exterior

Proteger la madera no basta con una sola aplicación. Para garantizar una madera exterior atractiva y en buen estado, es fundamental realizar un mantenimiento periódico:

• Limpieza regular:
  • Retirar el polvo y la suciedad con un trapo húmedo.
  • Lavar con agua y jabón neutro una o dos veces al año.
  • Evitar productos abrasivos que dañen la superficie.
• Revisión anual:
  • Observar si hay cambios de color, grietas, zonas resecas o hinchadas.
  • Comprobar si hay signos de ataque de insectos (agujeros, serrín).
• Renovación del tratamiento:
  • Reaplicar el tratamiento protector cada 1 o 2 años.
  • En zonas con más exposición solar o salina (como la costa alicantina), puede ser necesario hacerlo con mayor frecuencia.
• Lijado suave antes de aplicar:
  • Siempre que se renueve el tratamiento, realizar un lijado suave para eliminar restos antiguos y abrir el poro de la madera.
• Protecciones adicionales:
  • En mueble de exterior utilizar fundas protectoras cuando no se esté utilizando.
  • Evitar el contacto directo con el pavimento mediante soportes o taco.

Aplicar el tratamiento correcto sobre la madera y realizar un mantenimiento periódico de forma profesional asegura máxima protección junto con un acabado estético y duradero.

En nuestra empresa de pintura en Alicante ofrecemos un servicio especializado de protección de madera exterior. Utilizamos productos adaptados al clima local, trabajamos con rigor técnico y garantizamos acabados impecables tanto en madera nueva como en restauraciones.

Si necesitas asesoramiento o un servicio profesional para tratar la madera de tu vivienda, jardín o local en Alicante, no dudes en contactar con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte a conservar tus estructuras y elementos de madera en perfecto estado durante muchos años.